Saca las garras
y
escarba un hoyo en la tierra.
En esa tierra
frÃa
húmeda
sagrada.
Métete ahà .
tal vez estés sangrando, .
tal vez ya no. .
Recógete,
deja que cada partÃcula terrosa te ennegrezca .
que se quede entre tus uñas, .
y se meta entre tu pelaje y tus poros .
Tu corazón .
comienza a palpitar más despacio
más bajo .
y más bajo .
Estás muriendo .
pero no estás muriendo .
y entre los labios
tienes un largo
aliento
Gracias por compartir Fernanda! Con las uñas y los poros de la piel llenos de tierra... eso es la vida.
no estamos muriendo, estamos sanando...
Gracias Fer!!!
morimos cuando respiramos despacio...siempre lento como la vida que llega de puntillas.
Hermoso. Me llegó profundo. Gracias!