Ilse Santiago
Ciudad de México, México a 22 de enero de 2023
Texto para entrega de la materia Historia general del bordado
Impartido por Gimena Romero
Para el escrito de historia general del bordado quería contar mi experiencia personal con una narrativa diferente, es así como investigando subgéneros dentro de la narrativa me encontré con la crónica. Me atrapó porque puede ser definida como un cuento de la vida real y al tratarse de la materia de historia general del bordado me pareció adecuado. Nada aquí es inventado.
- ¿Entonces, aún crees que no es relevante la historia del bordado en el mundo moderno? - Claro que puede ser una historia dolorosa y hasta es capaz de llenarte de rabia los huesos, pero no deja de ser maravillosa por sí misma.
He de confesarte que yo tampoco lo entendía, creí que el bordado podía ser reducido al conocimiento de la técnica y que al no haber mujeres bordadoras en mi linaje, ellas, las mujeres que bordaron antes de mí no tenían nada que ver conmigo.
Un error muy grave de mi parte. Y si me permites me gustaría comenzar desde el principio, cuando se hablaba de un bordado primitivo independientemente de si se trataba de plumarios o de mare sutura, lo que quiero que recuerdes es que se bordaba para proteger al cuerpo.
El bordado era considerado algo tan fuerte que incluso podía protegerte después de la muerte. Esto sufrió una transformación con la caída de las civilizaciones matriarcales, dónde el bordado fue relegado a una “labor” del hogar.
Desde este punto de la historia, el bordado adquirió un significado asociado a “mujeres de bien” siendo enseñado desde la infancia exclusivamente a las niñas. Atrapando sus voces en el anonimato doméstico.
- ¿Pero ha pasado realmente así? – O simplemente se trata de una voz que se expresa con agujas e hilo, una voz diferente pero que no deja de estar presente. Incluso desde la ausencia de los bastidores, los hilos y hasta las agujas, lo que no puede ser borrado es la presencia de la bordadora.
Una voz que en la actualidad usa el bordado como una forma de resistencia, de lucha y de reclamo de los espacios públicos. Se trata de las mismas mujeres acercándose desde diversos espacios al bordado, esta vez, por voluntad propia.
Ahora puedo ver esta historia como lo haría una bordadora, reconocernos e identificar que estuvimos y estamos presentes.
Una bordadora es el eco de todas las mujeres que bordaron antes de nosotras.
Ya eres parte de esta historia.
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